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| Foto: (Reuters) |
Fue en el partido de Estados Unidos - Bélgica, en el cuál los norteamericanos quedaron eliminados. Pese a la derrota, el guarda-meta deslumbró en una actuación sorprendente, en el que salvó muchas situaciones claras de gol. Con 16 atajadas el portero estableció el récord de más paradas en un partido mundialista, dejando atrás el de 1966.
Esto contribuyó para que sea elegido el mejor jugador del partido, pero con un sin sabor de haber quedado fuera del mundial. Jürgen Klinsmann alagó la gran actuación de su portero,"Tim estuvo fenomenal", remarcó y dijo que se merecía todos los reconocimientos del mundo.
